Estrategia corporativa, qué es y cómo diseñarla

2 de diciembre de 2022
Estrategia Corporativa

A nivel empresarial las estrategias son factores esenciales para crecer o desaparecer del mercado. La estrategia empresarial tiene como objetivo establecer cómo una empresa crea valor para ésta, sus clientes y proveedores, independientemente del tamaño que tenga ésta.

Si una empresa no planifica estrategias, tendrá dificultades para lograr que los clientes potenciales compren sus servicios o productos en lugar de hacerlo a los competidores. Las estrategias empresariales son de tres tipos: corporativas, competitivas u operativas, más conocidas como estrategias funcionales. En este artículo te contamos lo que necesitas saber sobre la estrategia corporativa, en qué consiste y qué acciones de estrategias corporativas puede planificar una empresa.

En qué consiste la estrategia corporativa

Una estrategia corporativa consiste en definir qué tipo de negocios podría desarrollar la empresa y cómo esos negocios pueden ayudar a la empresa a obtener mejores resultados. Una estrategia corporativa va más allá de planificar acciones que permitan superar a la competencia directa. Los objetivos de la empresa son más amplios y globales siendo la diversificación el elemento clave de un plan estratégico corporativo.

Cualquier tipo de empresa, ya sea una pyme, microempresa o multinacional, puede definir y planificar una estrategia corporativa a medio y largo plazo.

Por tanto, una empresa que tenga una estrategia corporativa habrá definido y planificado un conjunto de acciones específicas que tienen como objetivo lograr una serie de ventajas competitivas. Estas ventajas pueden generarse a través del desarrollo de otras líneas de negocio en otros sectores diferentes a su actividad principal y/o comercializando nuevos productos en otros mercados.

En el momento de plantear qué estrategia corporativa seguir, puede ayudar responder a varias preguntas. Las cuestiones que un directivo o gerente de una empresa debe responder son:

  • En primer lugar, ¿Qué tipo de negocio podríamos desarrollar?
  • En segundo lugar, ¿Qué aspectos o recursos existen en la empresa actualmente que sean capaces de crear sinergias para desarrollar el nuevo negocio y crear valor?

Podemos ser más específicos sobre la primera pregunta ¿Qué tipo de negocio podemos desarrollar?, respondiendo a las siguientes preguntas:

  • ¿En qué eslabón de la cadena del valor de la industria podemos participar?
  • ¿Qué tipo de productos podemos comercializar?
  • ¿Cuáles son los mercados (locales o globales) a los que podemos acceder o competir?

Estos tres interrogantes deben despejarse desde la óptica que sugiere la segunda pregunta que se refiere a las posibilidades y sinergias que existen en la organización: ¿Cómo podemos generar sinergias que beneficien los nuevos modelos de negocios o productos?

Antes de continuar, es conveniente aclarar el significado de sinergia en el contexto empresarial. Cuando hablamos de sinergia nos referimos a la interacción o acción conjunta de varios elementos que producen un efecto más óptimo que si actúan de forma independiente. Por ejemplo, si una empresa del sector tecnológico adquiere otra compañía más pequeña que comercializa un producto innovador, como un programa informático, puede generar sinergias en el sentido que la gestión financiera o la gestión de los recursos humanos pueden ser asumidas por los departamentos que ya existen en la compañía.

Otro tipo de sinergia que se puede generar es la reducción de los gastos de marketing, ya que el nuevo producto puede ser comercializado junto con los productos que ya ofrece en el mercado donde opera la empresa.

Qué es la estrategia corporativa

¿Qué acciones de estrategias corporativas se pueden implementar?

Cuando una empresa decide crecer, se plantea qué acciones estratégicas corporativas implementar para aumentar su presencia en el mercado y aumentar sus ventas. Las formas para ejecutar las acciones de una estrategia corporativa son:

Diversificación

La diversificación, en el contexto de la planificación estratégica corporativa de una empresa, se refiere a desarrollar nuevos negocios aprovechando el expertise y los recursos internos de la organización. Es decir, decide crear una nueva unidad de negocio para introducirse en otros mercados. Por ejemplo, la compañía Samsung adoptó el método interno de implementación de estrategia corporativa para vender en otros mercados. Samsung pasó de ser una empresa dedicada a la producción de electrodomésticos y televisores a operar en el mercado de los teléfonos móviles y smartphones gracias a sus capacidades y recursos internos.

Por otra parte, la diversificación también puede producirse a través de otras vías:

  • Diversificación geográfica: ingresando en mercados de diferentes países o regiones. Por ejemplo, Inditex ha establecido tiendas de Zara en todos los países del mundo.
  • Diversificación mediante negocios no relacionados: este tipo de acción estratégica corporativa aborda cuestiones como desarrollar diversas unidades de negocio que no son similares a su actividad comercial o no tienen que ver con su industria de origen. Un ejemplo es una empresa que comercializa moda y se expande hacia negocios relacionados con los seguros o los viajes.
  • Diversificación mediante negocios relacionados: en este caso una empresa se enfoca en desarrollar productos y actividades que tengan relación con su actividad principal. Por ejemplo, Apple inició su aventura empresarial vendiendo ordenadores y diversificó su negocio hacia otros nichos como las tablets, los móviles o los relojes inteligentes.

Alianza estratégica

Otra de las formas de implementación de estrategia corporativa es colaborando con otra empresa, ya sea competidora directa o indirecta. Consiste en desarrollar una relación mutuamente beneficiosa entre las dos organizaciones. Las empresas que crean una alianza estratégica generalmente comparten experiencia o conocimiento, recursos, canales de distribución, investigación y desarrollo, etc.

Un ejemplo de alianza estratégica es Starbucks y Nespresso. Ambas empresas colaboran y han puesto a la venta en supermercados cápsulas con la tecnología Nespresso y el café de Starbucks. Esta acción estratégica corporativa es beneficiosa para ambas empresas, porque expanden su presencia en el mercado y el valor de sus marcas.

Fusión o adquisición

Otro método muy frecuente de estrategias corporativas es la opción de crear fusiones y adquisiciones. La fusión es más común entre empresas de tamaño similar. En cambio, las adquisiciones se producen cuando una empresa compra a otra. Generalmente, una empresa de gran tamaño adquiere a otra empresa más pequeña.

Tanto las fusiones como las adquisiciones pueden tener lugar entre empresas competidoras y el objetivo es reducir la competencia en el mercado y crear una organización más fuerte.

La estrategia corporativa por fusión o integración puede ser horizontal o vertical.

Integración Horizontal

Esta situación de integración horizontal se produce cuando una empresa se fusiona con empresas competidoras. Es decir, las empresas tienen la misma actividad y comercializan o producen un producto o servicio similar. Además, se dirigen al mismo público objetivo o segmentos.

Una empresa que planifica una estrategia corporativa de integración horizontal busca algunos de estos objetivos: ganar posicionamiento a través de la reputación de la marca de la empresa adquirida; conseguir mejoras en la distribución de los productos; incrementar su poder de negociación; escalar y posicionarse en el mercado gracias a eliminar parte de las empresas competidoras.

Integración Vertical

Las empresas pueden planificar una estrategia corporativa de integración vertical adquiriendo otras empresas que participan en la cadena de valor. El objetivo de la implementación de estas acciones estratégicas es tomar una posición de mayor control dentro de la industria o el sector en el que opera.

Por ejemplo, una organización puede fusionarse verticalmente cuando compra una empresa proveedora. De esta forma accede al control de los materiales de los productos que fabrica y puede generar ventajas competitivas ya que facilita mejorar la calidad y reducir los gastos de fabricación.

La acción de estrategia corporativa de fusión o integración vertical, afecta a la cadena de valor de forma más profunda. Por esta razón, los directivos necesitan considerar y evaluar cómo se pueden producir sinergias.

Con la integración vertical las empresas obtienen varios beneficios: ganar especialización; crear barreras de entradas a otras empresas que quieran acceder a ese mercado; permite ofrecer productos con mayor calidad y mejorar el proceso de producción.

Ejemplos de acciones de estrategias corporativas

¿Cómo diseñar una estrategia corporativa?

Ahora que ya sabes en qué consiste una estrategia corporativa y qué acciones se pueden planificar, vamos a ver los pasos generales para realizar una planificación. A continuación, están los pasos que debes seguir para diseñar un plan estratégico y ejecutarlo acertadamente:

  1. Define la visión y misión de la empresa. La visión se refiere a establecer las aspiraciones sobre qué tipo de empresa puede llegar a ser en el futuro y la misión define el tipo de clientes, mercados, volumen de actividad, etc.
  2. Analiza la situación actual de la empresa. En este primer paso se utiliza la herramienta de análisis DAFO para identificar las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas de la empresa en el mercado en el que opera.
  3. Define la ventaja competitiva. Es decir, qué valor único ofreces a los clientes: precio, sistema de entrega, innovación, etc. La definición en primera instancia de una ventaja competitiva y su posterior obtención, está estrechamente vinculada al tipo de estrategia competitiva que la empresa decida seguir o implementar.
  4. Define los objetivos que quieres lograr. Una vez hecho el análisis de la situación de la empresa e identificado la ventaja competitiva, se deben establecer los objetivos a conseguir a medio y largo plazo. Estos objetivos deben ser específicos, realistas y alcanzables. Los objetivos proporcionan un enfoque claro hacia dónde dirigir los esfuerzos y la planificación estratégica se ejecutará con mayor eficacia.
  5. Establece los recursos necesarios. Estos pueden ser humanos, económicos, tecnológicos, materiales, etc.
  6. Diseña las acciones a realizar. En función de los objetivos marcados y la misión de la empresa, establece las acciones a implementar a corto, medio y largo plazo.
  7. Ejecución de acciones. Este es el momento de implementar aquellas acciones necesarias para el logro de los objetivos.
  8. Mide los resultados. Solo midiendo los resultados a través de indicadores clave de rendimiento (KPI) puedes verificar si la implementación de acciones va por buen camino. Algunos indicadores pueden ser: facturación, número de ventas, reducción de gastos, etc.
  9. Control y seguimiento. Además de evaluar los indicadores para comprobar si la estrategia corporativa que has planificado y ejecutado es adecuada o no, es necesario hacer un seguimiento frecuente, que puede ser mensual. Con el seguimiento, puedes modificar y actualizar las acciones para lograr los objetivos establecidos.

Como has podido comprobar la gestión y administración de una empresa es un mundo amplio donde son necesarias habilidades estratégicas. Si buscas cómo mejorar tu pensamiento estratégico consulta los mejores MBA que se imparten en España y vive una experiencia de aprendizaje transformadora.